En tiempos de crisis es un desafío para los líderes dirigir mantener la calma y hacer que los equipos trabajen motivados y sean eficientes.
El coronavirus nos obliga a transformar la manera en la cual trabajamos y los estilos de liderazgo son puestos a prueba. Bajar la intensidad de las emociones para poder tomar decisiones correctas y poder comunicar de manera efectiva es una actitud que los líderes deben perseguir no se puede aportar soluciones ni transmitir motivación a los colaboradores bajo angustia, miedos o desesperación.
Se hace clave tener un liderazgo empático para entender las reacciones de los demás, mantener un buen clima laboral y lograr el compromiso de los colaboradores.
La persona que está al frente del equipo debe predicar con el ejemplo, comportarse de manera profesional y a la vez generar confianza en las personas. Los equipos, buscan en los líderes no sólo seguridad y capacidad resolutiva, sino que también personas que se muestren cercanas, que generen confianza, “de poder llegar a ellas” y hablar no sólo temas laborales sino también personales. Es fundamental que la confianza prime hoy más que nunca, que los colaboradores puedan sentir que sus jefaturas confían en el trabajo que realizan, y que los líderes aprendan cada día más a “liderar sin mirar”, este es el desafío.
Dirigir con información limitada , bajo un escenario incierto y confuso no es un objetivo menor, es por ello importante que los líderes asuman que van a cometer errores y que se van a tomar decisiones con la información que se tiene en ese momento , decisión que puede ser acertada o no, lo importante es siempre seguir evaluando la situación y en base a la nueva información con la que se cuente, ir tomando nuevas decisiones o reforzando las decisiones tomadas en post del beneficio de las personas y la organización.
Liderar involucra también instruirse en lo que ocurre alrededor de la organización, de manera de poder comunicar efectivamente, controlar las ansiedades y especulaciones que muchas veces se generan en escenarios inciertos como estos, es por ello que es fundamental mantener la comunicación y lograr que se transmitan los lineamientos claros a los colaboradores generando valor, cercanía, productividad y compromiso.
En el escenario en que nos vemos enfrentados el reconocimiento juega un rol muy relevante, elogiar a los colaboradores por el trabajo del día a día, por el manejo ante situaciones difíciles, por las buenas ideas que pueden tener y aportar es un elemento valioso que no sólo los compromete con su trabajo, sino que también los ayuda a sentirse realizados profesionalmente.
El cuidar a los colaboradores es primordial, preocuparse de cómo están, de cómo se sienten, de cómo están sus familias, de qué necesitan para poder desempeñarse mejor es algo que los líderes deben estar en conocimiento y apoyar en la gestión de “que las cosas pasen” en la medida que se pueda. Realizar encuestas de clima, por ejemplo, son elementos valiosos que suman para poder tener “una foto completa” de cómo está el equipo con sus pares, con la jefatura y con la compañía en general.
Es fundamental que los líderes tengan en consideración los diversos escenarios que se ven enfrentados los colaboradores en la realidad que estamos viviendo y los consideren en la asignación de tareas y objetivos. Recordar que muchos de los colaboradores están trabajando desde sus casas, con niños que deben conectarse para sus clases remotas y posiblemente también están sin ayuda en las labores domésticas, son puntos no menores que debe considerar el líder en sus exigencias y mediciones. Por otro lado en el caso de los colaboradores que deben estar trabajando presencialmente porque su trabajo lo demanda , el líder debe gestionar para que puedan contar con los elementos de cuidados necesarios para evitar contagios y también con las herramientas de trabajo , velar por la protección de los colaboradores es una prioridad , considerar que muchas personas que trabajan presencialmente han tomado la decisión de aislarse para evitar contagiar a sus familias , por lo que posiblemente estén solos , son diversos aspectos que deben ser considerados.
Liderar manejando el detalle es clave , “pedir algo” sin saber si la organización es capaz de hacerlo requiere un doble click , un líder que no maneje los números que no maneje los detalles le es difícil dilucidar lo que es posible y lo que no es posible , el tener el conocimiento del estado de la organización ayuda a manejar las expectativas de los colaboradores y más aún en estos momentos en la cual existe una mayor sensibilidad en general.
Es importante mencionar que la humildad es ante todo tener la capacidad de reconocer que nos podemos equivocar, la humildad es lo que mejor puede transmitir confianza, sin confianza no hay colaboración, y por consiguiente se limita la comunicación ” no hay equipo ” y bajo ese contexto es muy difícil alcanzar un liderazgo eficaz y más aún en tiempos de crisis.